Con el estreno de El
Caballero de la Noche Asciende se da uno de esos fenómenos socioculturales
que suceden cada tanto, más específicamente cuando se estrenan películas de
superhéroes. Me refiero a la salida masiva de los nerds de sus respectivas
cuevas, comic en mano, para criticar todo cuanto sus “expertos” ojos ven como
fallos.
La última película de Nolan no solo significa el final de la
trilogía de El Caballero de la Noche,
si no que es otro round más de esa eterna pelea entre los amantes del cine vs
los talibanes de los comics.
A que me refiero con “talibanes de los comics”? A esa
especie que pulula en internet y solo saca su cara para ir al cine cuando se
estrena algo basado en los comics. Hasta acá no hay nada de malo, quien les
escribe también lee comics de vez en cuando. Pero lo que destaca de esta
especie es que van con lupa para masacrar cualquier cosa que se distancie de la
versión impresa, por mínimo que sea.
Como dije anteriormente, yo también leo comics, pero primero
que nada soy amante del cine y entiendo que es un medio audiovisual, con su
propio lenguaje, muy distinto al lenguaje que se presenta en una revista
impresa llena de viñetas. Al menos yo, prefiero mil veces una buena película con
licencias al material que se basa, que un calco a lo impreso pero que como film
valga nada. Es hasta absurdo que uno pretenda que la película en cuestión sea
exactamente igual al comic. Si bien se hicieron intentos, como la Hulk de Ang Lee, hay que ver el
resultado final para saber que cada medio es un mundo distinto. Es casi como
pretender una fiel adaptación de un juego de mesa (a no, esperen, eso ya se
hizo hace poco y así fue el esperpento que salió).
Lo irónico, es que para quienes conozcan un poco de comics,
notara que entre dibujante y dibujante, el diseño del mismo personaje cambia,
siguiendo con Batman, no es el mismo murciélago que se ve en El Regreso del Caballero de la Noche
que el de La Broma Asesina. Pero
como esta impreso en las sagradas hojas, esta perdonado.
Pero el cumulo de estupidez llega cuando las quejas vienen
por cosas insignificantes. Una cosa es quejarse si a Superman le ponen un traje
amarillo, pero otra es que Hulk no tenga pantalones violetas cuando se transforma,
dando a entender que Bruce Banner, un científico, debe andar por la vida con
unos pantalones violetas chillones que le queden seis talles mas grandes para cuando
se transforme …
Invito a cualquiera de los lectores a pasar por algún foro
de cine y leer algunas de las criticas que se le hizo a las recientes Batman y
Spiderman, y verán que esto que comento acá es el diez porciento de lo que en
realidad pasa.
En lo personal creo que si una película esta basada en un
comic es eso. Primero es una película que adapta a su propio medio algo que
esta impreso en viñetas. Y como cada film tiene su director, es la visión que
ese realizador le da a lo que esta adaptando. Si a algún talibán no le agrada
lo que ve en pantalla, siempre tendrá las novelas graficas intactas en su
estantería, porque tampoco es que se queman los comics que se adaptan (y lo
mismo podría aplicarse a los libros)
Un saludo charlando desde El Calabozo del Androide.
Jorge Marchisio
Mi face Yorsh A. Romero
Bueno, ya sabes de sobra lo que pienso respecto al tema.
ResponderEliminarLos fanboys me dan ASCO, y eso que yo soy un lector de cómics asiduo, pero sé distinguir entre un medio y otro.
Los cómics son una cosa, y las películas otra, pero esta gente es incapaz de separar conceptos, así como de disfrutar del cine.
Lo mejor es ignorarlos y ya está. Que sigan con sus rabietas.