martes, 29 de enero de 2013

Que la libertad ruja


Django Sin Cadenas   




Y por fin llega a nuestras salas una de las películas más polémicas de este verano. Polémica armada por sectores ultra conservadores, Ned Flanders o gente que quiere hacerse ver. Y es que donde muchos se escandalizan porque en una película que trata sobre la esclavitud dicen la palabra “nigga” (término despectivo para decir negro a alguien), yo vi una obra maestra contemporánea.

Estamos a dos años de la Guerra Civil estadounidense. El alemán Dr. King Schultz es un caza recompensa en búsqueda de tres hermanos criminales. Para eso compra al esclavo Django, quien conoce a dichos malvivientes. Mientras emprenden su camino, Schultz enpatiza con Django y le hace la promesa de que tras cumplir su cometido, lo acompañara en la búsqueda de su esposa, también vendida como esclava.

En opinión personal nos encontramos ante el Tarantino más maduro de todos. Lejos de regodearse de escenas largas que no llevan  ningún lado para mostrar su pericia a la hora de dialogar banalidades, en esta ocasión se prescinden de ellas para darle más dinamismo a la peli. Ojo, no desesperéis, hay escenas made in Tarantino 100% (en especial una sobre unas capuchas).

Y no es únicamente que digo que Tarantino alcanzo su maduración. Si no porque supo construir quizás el mejor personaje de toda su filmografía. Y sí, estoy hablando del Dr. King Schultz. No solo la interpretación de Waltz vuelve a ser magnifica, si no que el propio personaje está concebido de forma magistral. Es un caza recompensa alemán, que no titubea en matar a sus presas, incluso si estas están con sus familias. Pero en sus conversaciones con Django se queda atónito al ver el mal trato hacia los negros por el mero hecho de ser de otra raza. Ni hablar cuando la historia lo lleva a Candyland, lugar donde ser negro es sinónimo de muerte segura y horrible. Sus caras y la repulsión que muestra  al ver las bajezas que sufren los esclavos. Tarantino no necesito recurrir a un personaje santurrón o moralista, solo le basto poner a alguien de otro país para hacer su crítica al esclavismo.

Pero no solo el personaje de Waltz es genial, el resto del elenco cumple a la perfección. Jamie Foxx quizás es el que menos luces se lleve (a pesar de ser el protagonista) porque su personaje es el más medido de todos. Igual, al principio de su relación con Schultz es cuando vemos el talento del actor al interpretar a un negro que sorpresivamente es tratado como humano.

Luego tenemos el tándem DiCaprio y Jackson. O mejor dicho “el dúo racista”, ya que por estos dos personajes se armó todo el revuelo de críticas injustificadas. Y es que haber, si estamos ante un esclavista sureño, y su criado mayordomo que de tanto tratar con su amo actúa como otro blanco, es natural que traten a los negros de forma brutal y les digan nigga, pero bueno, quizás algunos esperaban que en vez de usar dicho término despectivo, les digan “gente de chocolate”. En cuanto a sus actuaciones, DiCaprio da rienda suelta a un histrionismo poco visto en él, pero que le calza perfecto al personaje. Pero es que Samuel L. Jackson se saca de la manga a un mayordomo que en realidad es el que controla las decisiones del lugar, siendo tan racista que haría sentir incomodo a cualquier miembro del Ku Klux Klan.

Pero si la construcción y el guión son geniales, Tarantino le hace un guiño a los fans de los westerns. Ya sea canciones, frases, personajes o situaciones de aquellas pelis clásicas de cowboys se hacen presente constantemente. En este sentido no defraudara a nadie.

La utilización de la música vuelve a ser otra “tarantineada”. Los temas clásicos están ahí, pero es que a la hora de los tiroteos, cuando uno espera que salga un Ennio Morricone a todo volumen, escuchamos un rap. Y como suele pasar, estas raras combinaciones les quedan bien.

Django Sin Cadenas es la muestra clara que un director puede hacer una de sus mejores películas, sin traicionar su propio estilo, pero sin la necesidad de repetirse hasta el hartazgo. También es el claro ejemplo de que aún se vive en una sociedad arcaica, que se escandaliza por boludeses superficiales sin intentar (o poder, nunca se sabe), mirar más a fondo.


Nota: un fucking 10


Un saludo rompiendo las cadenas.


Jorge Marchisio
Mi face Yorsh A. Romero
 

viernes, 25 de enero de 2013

Ah Vuelto


El Último Desafío  









Hace poco comente Jack Reacher, una peli hecha a la antigua, dando a entender que los viejos géneros y personajes están volviendo de a poco. Bueno, El Ultimo Desafío es un claro ejemplo de esta tendencia.

Ray Owens es el sheriff de un perdido pueblo de Arizona. Es el día previo al partido final del equipo de futbol local, así que la mayoría de los habitantes se fueron con el equipo. Es en esa misma noche cuando el líder de un cartel mexicano se escapa del FBI, y a bordo de un auto imparable de 1000 caballos de fuerza, planea cruzar la frontera por la zona de dicho poblado.

Si la sinopsis parece una sucesión de tópicos, no se sienta estafado, porque la película es eso. Todos los tópicos y típicos característicos de los 80 se repiten en esta película hecha para gente que sabe lo que va a ver, y va a disfrutar viendo esa obviedad.

Y no lo digo para hacerme el cool y el snob, porque de hecho, la peli me gusto. Y es que a cualquier hombre de 25 a 30 años y que se precie de su masculinidad, seguro creció viendo las pelis de acción de los 80. Si a eso le sumamos que el protagonista es un ex retirado como Schwarzenegger,  no hay mucho más que pensar.

Pero si bien el gancho de la peli es ver en acción al “Gobernator”, luego de verla dan ganas de aplaudir la utilización del austriaco. Y es que la historia no gira en torno a él, no estamos ante esos casos que se armó todo en torno a un actor. Todo lo contrario, Schwarzenegger es parte de un engranaje. Es uno más del elenco, y en varias ocasiones pasan bastantes minutos sin que se lo vea, en post de construir la historia. Todo un logro en mi opinión, ya que la tentación de cualquiera era exprimir al ex Conan al mango.

El otro acierto de la peli viene también de parte del equipo de guionistas. No solo por darle a la trama un tono old, si no que en realidad estamos ante un western moderno. Reemplacen autos por caballos y nos queda un film de cowboys de los 60. 

De todas formas, como dije más arriba, Schwarzenegger no es el centro de la atención, pero el rol que se le da lo cumple a la perfección. No se puede decir lo mismo del resto de los personajes. Y es que salvo el personaje de la hermosa Jaimie Alexander, y el de Peter Stormare (aunque en este caso más por pericia del actor que por personaje) el resto son cliché puro. Forest Whitaker esta puesto como un agente del FBI de manual, también tenemos los personajes cómicos como el de Knoxville o el que es sacrificado en la historia para darle el empujón final al resto. No digo que las películas de acción se deban preocupar por construir personajes como si fueran un drama. Pero las que se toman la molestia de hacerlo son las que destacan por sobre el resto.

En cuanto al trabajo del director. Destacar que filma con buen pulso, sin recurrir a la cámara parkinson, cosa que se agradece. 

El Ultimo Desafío es otra muestra más de que no solo se quiere recuperar a viejas leyendas del cine de acción, si no que también se quiere reflotar un modo de contar historias que muchos estábamos extrañando.


Nota: 7


Un saludo cargando el revólver.


Jorge Marchisio
Mi face Yorsh A. Romero
 

lunes, 21 de enero de 2013

L.A Noir



Fuerza Anti Gangster   



Entre medio de tantas películas oscarizables, siguen saliendo obras que injustamente van a pasar desapercibidas por las salas. Así como comente en mi última crítica, de Jack Reacher, hoy pasa lo mismo, y es que de nuevo tenemos enfrente una buena película que va a durar poco y nada en las salas.

Estamos en Los Angeles, son los años cuarenta y la Guerra Mundial acaba de terminar. Mientras todos están cansados de luchar, Mickey Cohen se hace con el poder y se establece como capo mafia. Es en ese momento cuando uno de los pocos policías no corruptos, el Sargento O´Mara es contactado para armar una fuerza de choque que empiece a golpear los negocios sucios de Cohen para irlo haciendo desangrar dinero.

El año pasado salió otra película de mafiosos, Lawless. En su momento dije que era un drama con gangsters de por medio. Bueno, olvídense de eso a la hora de ver esta peli, porque toda la sutileza y dramas personales de los personajes acá son cambiados por balas.

Y es que si aquella peli se metía con los problemas personales de los personajes, dejando de lado una potencial acción, acá es al revés. Casi cada diez minutos hay un tiroteo de muchos contra pocos, y donde siempre hay bajas, todo acompañado por el sonido de las Thompson escupiendo balas. 

Y acá quiero destacar el buen trabajo del director Ruben Fleisher. Escapando de la puta moda de filmar todo con la cámara moviéndose como si tuviera parkinson, esta vez se puede ver todo clarito y entender quien es el que está quedando como colador y quien es el que lo está matando.

Otro de los aciertos de la peli es la recreación de L.A en plena época noir. Vestuario, peinados, fotografía e iluminación se llevan las palmas en una ambientación perfecta. 

Algo que me llamaba la atención antes de ver la peli era el elenco, a todos los considero buenos actores. Por suerte todos cumplen sus roles, pero sin ser sobresalientes. Y es que el problema de prescindir de la construcción de personajes en post de la acción, termina jodiendo en lo referente a las actuaciones. Y es que supongo que a todo actor le debe romper los huevos no tener un personaje muy construido con el que poder trabajar.

Ahí está Emma Stone en un personaje metido con vaselina, que no se entiende bien que hace saliendo con el malo. O un Ryan Gosling haciendo el prototipo de policía dandy. Pero en especial termina afectando más que nada al villano interpretado por Sean Penn. Por desgracia su personaje termina siendo bastante sobre actuado y rozando la caricatura. A eso súmenle los kilos de maquillaje y prótesis que tiene en la cara. Una pena, ya que con un malo mejor hecho y con más fuerza seguramente la peli subiría varios puntos.

Par finalizar, comentar algo que está siendo bastante criticado por los que vieron la peli. Y es que su parecido con Los Intocables es casi obvio. En ambas se forma un equipo para policial para detener a un mafioso local. Y hasta sus villanos son parecidos, porque el Mickey Cohen de esta peli es un calco en su forma de actuar al Al Capone de De Niro. Por suerte los protagonistas si son bastante distintos, diría que casi opuestos. Y es que si Eliot Ness era un oficial que seguía el manual al pie de la letra, O´Mara es una bomba de tiempo a punto de explotar que no duda en matar y romper huesos de criminales.

Fuerza Anti Gangster es una buena película, pero con unos quince minutos más para definir a los personajes y un Sean Penn con mejor performance (quizás Calu Rivero le contagio lo de actuar mal), seguramente estaríamos hablando de la mejor peli de gangster en años.

Nota: 8

Un saludo  siendo incorruptible.

Jorge Marchisio
Mi face Yorsh A. Romero