viernes, 14 de junio de 2013

Superman está a salvo


El Hombre de Acero    


Que Superman hacía rato que cinematográficamente no metía una peli es sabido por todos. Desde la genial Superman 2, el hijo de Krypton la viene pifiando y feo en la pantalla grande. Y es que siendo sinceros ¿Cómo hacer una buena película sobre un superhéroe que tiene TODOS los poderes? Al parecer el trio Snyder, Nolan y Goyer tenían la respuesta.

Krypton. Un planeta a millones de años luz, se encuentra a punto de implosionar. Los El previendo esto tienen un hijo con parto natural, el primero en siglos; mientras el general Zod intenta un golpe de estado que fracasa y lo condena a la Zona Fantasma. El recién nacido Kal El es la única esperanza para que krypton resurja, y los padres sabiendo esto deciden mandar al bebe al planeta Tierra. Muchos años después, un vagabundo Clark Kent busca entender cuál es su lugar en el mundo y para que fue enviado a nuestro planeta.

Como pueden ver, tomando nota de lo que paso con Superman Returns, David Goyer y Christopher Nolan (guionistas de esta peli) decidieron cambiar el enfoque del personaje. Si, una vez más Krypton está presente en la historia, y aunque parezca algo ya reiterativo, la forma en que está escrita la historia es necesaria esa introducción.

Ahí vemos las motivaciones de los El y porque deciden mandar a su hijo a la Tierra, quitando el factor azar de la llegada del kryptoniano. Además que funciona también para conocer al villano del film, cosa que se da muy naturalmente.

Acá viene uno de los enormes aciertos de esta peli. La primera parte del segundo acto se enfoca en mostrarnos a un Clark que no sabe su lugar en el mundo, que se sabe distinto y superior a los humanos pero sin entender su misión. Todo este tramo de búsqueda le da sentido al personaje en sí, nos hace entender porque Superman es el Superman que todos conocemos y no que se comporta así solo porque es muy bueno.

De todas formas acá se ve uno de los errores de la peli. Los guionistas quizás pasándose de grandilocuentes cayeron en el fallo de hacer que tanto Jonathan Kent como Jor El (ambos padres de Superman) se pasen de magnánimos y caigan en la sensiblería barata.

Y lo que todos estaban esperando, la gran queja que se tenía para con las anteriores pelis, acá esta solucionada. POR FIN vemos a Superman cagandose a trompadas por mucho metraje contra los otros kryptonianos. 

Muchas críticas se centran en pegarle a la peli porque pasan muchas cosas en poco tiempo. Si, los primeros veinte minutos son bastante atropellados, pero porque cuentan algo que ya TODO el mundo sabe (la destrucción de Krypton), pero que eran necesarios para darle entidad al protagonista y al villano. O lo que se puede resumir en “se quejan por quejarse de algo”.

Si es achacable que en un par de tramos los efectos se hacen notar bastante, en especial en la mega pelea final de Superman vs Zod (recuerda bastante a  Neo vs cientos de Smith). 

También como comente más arriba, a veces pecan de querer darle una majestuosidad a los personajes paternos que termina haciéndose obvia la búsqueda de la lagrima fácil. Pero son dos defectos, muy pequeños comparados con todos los aciertos.

En cuanto al reparto y a la elección de Amy Adams como Loise Lane. Si, la hermosa colorada no se parece en nada a la Lane que todo el mundo conoce, pero es tan buena actriz que logra que el espectador termine comprando su personaje. Cavill cumple sin más; los que de verdad se cargan la peli a sus espaldas son el trio Crowe, Costner y Shannon. Los dos primeros al demostrar un lado paterno que nunca se había visto con el personaje; el último por lograr un gran villano sin caer en la caricatura o el histrionismo. Y es que si uno toma distancia, hasta quizás se ponga del lado de Zod.

El Hombre de Acero demuestra que no era imposible hacer una gran película de Superman, solo que se necesitaba gente competente que se tome el proyecto serio. Con un gran guion y un buen director siempre es posible hacer una genialidad como esta.

El personaje, y sobre todo el público, se merecía algo así. Y la espera valió la pena.



Un saludo asumiendo mi lugar en el mundo.



Nota: 9


Jorge Marchisio
Mi face  Yorsh A. Romero


No hay comentarios:

Publicar un comentario